Queridos amigos:
Dentro de pocas semanas el año 2017 pasará a la historia y se lleva consigo muchos gratos recuerdos, logros alcanzados, ideales y tantas otras cosas que de seguro nos propusimos en su comienzo. Pero también se lleva los recuerdos tristes, las aflicciones y las duras pruebas que se nos presentaron y que nos hicieron tener que hacer un alto para tomar decisiones que se ajustaran a la realidad.
Sin embargo, no sería apropiado ni pertinente dejar que pasen las últimas semanas de este año sin reflexionar un poco en todo lo que hemos vivido en el 2017. Es posible que la euforia y alegría de la época nos haga perder de vista un poco aquello que es valioso y duradero, por eso les comparto algunas preguntas que nos pueden ayudar a hacer un recuento apropiado sobre lo que ha significado vivir este año:
- ¿Qué bendiciones específicas recibiste durante el año?
- ¿Cuál fue el momento más difícil de enfrentar este año?
- ¿Cuál fue el momento más feliz de este año?
- ¿Qué lecciones aprendíste de las experiencias vividas?
- ¿Cómo fue tu crecimiento espiritual durante este año? ¿Te sentiste más cerca del Señor?
- Si tuvieras que repetir algunas de las experiencias de este año, ¿cuál repetirías y por qué?
- ¿Te sientes arrepentida/o de algo que hiciste, o que no hiciste este año?
- ¿ Qué huella deja este año en tu vida?
- Siendo que diciembre es el mes de los regalos, ¿qué quieres regalarle a Jesús antes de que termine el año?
Que el Señor nos bendiga y ayude a vivir los años que nos resten con la firme convicción de que cada día debemos “Buscar el reino de Dios y su justicia, porque las demás cosas vendrán por añadidura” (Mat. 6:33).
Muchas felicidades para todos,
Evelyn O.