La Biblia dice que cuando conocemos a Jesús y le permitimos tomar el control de nuestra vida todas las cosas cambian. Somos nuevas criaturas. Creo que a todas las mujeres nos gustan las cosas nuevas. Cuando mi esposo y yo estábamos buscando la casa donde viviríamos después de retirarnos del trabajo activo en la iglesia durante más de cuarenta años, queríamos que fuera un lugar tranquilo, lejos del ruído característico de las grandes y complicadas ciudades; un lugar de paz. Para mí no era tan importante que la casa fuera grande, pero sí, que fuera nueva. No quería vivir en una casa con la amenza de las cucarachas, ratones, o insectos que abundan en las casas viejas. Dios escuchó mi súplica y nos permitió conseguir una casa sencilla, pero nueva.
Lo nuevo es hermoso, alegra el espíritu y nos hace sentir bien. Así me siento con el nuevo diseño de mi página. Es novedoso, sencillo, de un colorido extraordinario y siento que mucho más fácil de navegar. Hemos estado trabajando en este nuevo rostro por varios meses y me siento sumamente agradecida con Dios y con Daniel Cols por el trabajo y apoyo brindado para que el proyecto fuera una realidad. Me imagino que los que estaban acostumbrado a visitar el otro sitio se han sorprendido al ver el nuevo diseño. Lo hemos hecho con mucho cariño y tratando de hacer que la información sea más fácil para los usarios y, por qué no decirlo, más fàcil para mí que lucho con el tiempo y mis obligaciones personales para mantener información que pueda serles de utilidad.
Es mi deseo que al entrar en esta página puedan encontrar ayuda para su vida personal, orientaciones para compartir con familiares, amigos y compañeros cercanos. Confío que podremos continuar sirviéndoles en la medida que Dios nos permita y con el cariño de siempre. Dios nos ha dado mucho y de lo recibido de su mano debemos compartirlo con otros. Reciban muchas bendiciones y mi profundo agradecimiento por las palabras de cariño y aliento que recibo por parte de muchos de ustedes. Espero sus comentarios y observaciones así como sus sugerencias para seguir colocando materiales que puedan serles de ayuda en su ministerio.
Bendiciones para todos,
Evelyn Omaña