Todas tenemos la misma cantidad de tiempo, pero aquellas mujeres que han aprendido a usar su tiempo sabiamente alcanzan a realizar la mayoría de lo que se proponen. Muchas veces decimos que el tiempo no nos alcanza, sin embargo, el tiempo es uno de los recursos más equitativos que Dios nos ha dado y el éxito o el fracaso en el uso del mismo depende de nuestras prioridades y planificación.

A continuación compartiré algunas ideas que pueden resultar beneficiosas al tratar de organizar nuestro tiempo.

–          Enfócate en una tarea a la vez. Si sabes lo que tienes que hacer, cómo hacerlo y con qué hacerlo podrás ahorrarte mucho tiempo.

–          Al finalizar el día elabora una lista de todas las actividades que realizaste. Analiza la lista y decide si invertiste tu tiempo correctamente.

–          Elimina lo que te consume tiempo innecesario. Revisa que no estés consumiendo tu tiempo en actividades que no te darán resultados. ¿Estás contestando el teléfono cada vez que suena, o dejas que la contestadora lo haga mientras terminas tus tareas importantes?

–          Usa el calendario para anotar tus citas personales y médicas, así como las cosas más importantes que debes hacer cada día.

–          Bloquea en el almanaque el tiempo que necesitas para realizar alguna tarea importante (limpiar la despensa, el horno, preparar un tema, etc.

–          Dedica el mejor momento del día para realizar tus tareas. Algunas personas son más productivas en las horas de la mañana, mientras otros en la tarde o en la noche.

–          No aceptes compromisos para los días que has apartado para realizar tus tareas programadas.